Según el
economista de la OCDE Jens Arnold, se requiere una reforma integral del sistema
de seguridad social, así como una evaluación fiscal para abordar la
informalidad.
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La
Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) publicó
recientemente un informe para Colombia en el que se analiza la necesidad de
realizar reformas estructurales para mejorar la protección social, los
presupuestos públicos y la productividad. Jens Arnold, economista de la OCDE
para el país, habló con Portafolio sobre las conclusiones.
¿Cuáles son
los aspectos más importantes de esta investigación?
La
investigación abarca una amplia gama de temas. Hacemos mucho hincapié en la
reforma de la protección social, que tiene que ver con las dificultades
presupuestarias y con la pandemia. Millones de empleados informales se quedaron
sin sueldo de un día para otro, y no había nada en el sistema de seguridad
social existente que pudiera ayudarles; eran invisibles para el Estado. Es un
problema que surgió a raíz de la pandemia, pero también es una cuestión estructural.
¿No se
suponía que el cambio del año pasado iba a resolver estos problemas?
Todavía hay
numerosas dificultades sin resolver, y aunque la reforma hizo un ajuste fiscal,
apenas se abordaron las cuestiones estructurales. Esto implicaría aumentar los
ingresos fiscales mediante el aumento del impuesto sobre la giro de las personas físicas, revisar las
exenciones y, en consecuencia, reducir los impuestos sobre la nómina. Es
posible reducir a la mitad el coste de la creación de puestos oficiales. Dado
que el sistema actual perpetúa la informalidad, es vital trabajar en la
reducción del costo del trabajo formal, lo que iría de la mano con la
ampliación de la cobertura de la protección social.
Hoy en día,
sólo el 25% de los colombianos tiene una pensión contributiva, dejando al resto
fuera. Otra cuarta parte de la población cuenta con Colombia Mayor, sin embargo
este beneficio sólo alcanza la mitad del nivel de pobreza.
La cobertura
universal, como mínimo al nivel de pobreza, debería ser el objetivo. El sistema
actual está plagado de ineficiencias, y eliminarlas reducirá el coste global de
la reforma. Según nuestros cálculos, sería del 3,6% del PIB.
¿Sería una
reforma con tres vertientes? El trabajo, las pensiones y el presupuesto.
Es vital abordar
todos estos retos al mismo tiempo, poner en marcha una reforma integral que los
aborde todos, y luego hay muchos niveles de ambición política que se pueden
perseguir. No hay mejor momento para pensar en esto que ahora.
¿Qué opina
de los sistemas de pensiones públicos frente a los privados?
Lo que
consideramos un sistema de pilares no es una contradicción. Un pilar
fundamental cuyo objetivo es erradicar la pobreza más que centrarse en los
fondos de jubilación para los ancianos. Lo más probable es que el Estado
organice bien este sistema. Se trataría de un programa de transferencia de
política social. Las personas con salarios más altos, en cambio, tienen más
posibilidades en el segundo pilar. Puede ser público o privado, y ningún
sistema es superior al otro.
¿Qué impacto
pueden tener las elecciones en el crecimiento económico?
Las
elecciones son siempre un buen momento para celebrar los debates que requiere
un país. Sobre cuestiones estructurales, como los cambios en la protección
social y las reformas de la productividad, que han faltado en Colombia en las
últimas décadas. Las previsiones de este año serán seguramente inferiores a las
del año pasado. Debido a la epidemia en 2020, tuvimos un gran efecto rebote en
2021, pero sigo creyendo que Colombia está en una senda de desarrollo muy
fuerte.
¿Hasta qué
punto puede el país mantener los niveles actuales de gasto social?
La respuesta
financiera de Colombia fue rápida y eficaz. Lo que se logró con la iniciativa
Ingreso Solidario, que se desarrolló e implementó en un período muy corto y
tuvo un desempeño admirable dadas las circunstancias, es maravilloso. La
cuestión es que ese programa no proporciona la focalización a largo plazo que
se busca. Hay que pensar en cómo organizar la protección social de forma
eficiente para aliviar la pobreza sin gastar más de lo necesario.
Es el
momento de replantear el sistema de Ingreso Solidario, ya que actualmente los
subsidios se reparten entre muchos programas, y considerar cómo Colombia podría
construir un programa de seguridad social unificado que cubra a todos por
igual. Sin duda, esto será menos costoso.
¿Qué tareas
podría priorizar Colombia para impulsar la productividad?
Muchas
normas podrían hacerse más transparentes, reduciendo las barreras
administrativas a la creación de empresas, fortaleciendo la competencia y
aumentando el crecimiento de la productividad. Debido a la tensión de la
competencia, una empresa innovará y mejorará su producto o método. La
competencia puede reforzarse mediante mejoras normativas, y entonces la
competencia puede surgir del exterior
